LaLiga ha presentado hoy en Madrid a Alex, un personaje virtual creado y entrenado por inteligencia artificial. En un mundo donde la pelota parece rodar más en los servidores que en el césped, LaLiga se convierte en la primera competición profesional de fútbol en lanzar un influencer virtual, marcando un «hito» en la historia del deporte. Porque, al parecer, ya no es suficiente con goles y jugadas magistrales; ahora necesitamos avatares digitales para conectar con una generación que, supuestamente, solo entiende de píxeles y algoritmos.
Alex, un joven de 27 años —edad perfecta para ser fichado por cualquier club de élite—, es un apasionado del fútbol y los videojuegos, especialmente FC25 y LaLiga Fantasy. Un personaje diseñado meticulosamente para encajar en el molde perfecto del aficionado moderno. Se le puede seguir en las redes sociales oficiales de LaLiga y en sus propios perfiles de Instagram (@alex.laliga) y TikTok (@alex_laliga), donde, dicen, interactúa activamente con los aficionados. Pero su presencia no se limita al plano digital; Alex también asistirá a eventos físicos, presentaciones, ruedas de prensa y, quién sabe, quizá hasta le veamos dando órdenes desde el banquillo.
Con una «personalidad arrolladora» y defensor de las causas sociales, Alex será el abanderado de iniciativas como LaLiga VS, un proyecto que busca proyectar a nivel global el compromiso social del fútbol español. Porque nada transmite mejor los valores humanos que un ente digital programado para decir lo correcto en cada momento.
Javier Tebas, presidente de LaLiga, no ocultó su entusiasmo: «Convertirnos en la primera liga del mundo en lanzar un influencer virtual refuerza nuestra posición de líderes en innovación tecnológica de la industria del deporte. Vamos a seguir trabajando en esta línea, para continuar a la vanguardia del sector y encontrar los mejores caminos para estar aún más cerca de nuestros aficionados y espectadores». Al parecer, las emociones en las gradas y la pasión en el campo ya no son suficientes para acercarse al público.
En una época en la que la tecnología avanza a pasos agigantados, LaLiga da un paso más en el uso de la inteligencia artificial, fusionando innovación con un «mensaje ético». Alex no es solo una cara bonita generada por ordenador; está entrenado con un modelo de lenguaje similar a ChatGPT, lo que le permite colaborar con equipos creativos humanos —si es que aún queda alguno— en la generación de contenido y dialogar de manera «coherente y enriquecedora». Además, cuenta con herramientas para la generación de imagen, video y voz, permitiendo producir desde fotos hasta videos en movimiento con un aspecto hiperrealista. Porque nada dice autenticidad como un avatar digital hiperrealista.
La creación de Alex es el resultado de una amplia ingesta de datos: información sobre la audiencia, gustos, intereses y hábitos de consumo; información relativa al mundo del fútbol para convertirle en todo un experto de LaLiga; y, por supuesto, documentación referente a la ética y valores de LaLiga, incluyendo un código ético diseñado específicamente para personajes virtuales elaborado por la Universidad de Málaga. Un detalle que nos deja tranquilos: nuestro influencer virtual favorito promoverá una conducta positiva y respetuosa.
Mientras tanto, los personajes virtuales e influencers generados por inteligencia artificial se convierten en tendencia, especialmente provenientes de Asia. Según The Influencer Marketing Factory Report, el 53% de los encuestados sigue al menos a un influencer virtual y el 63% tiene entre 18 y 34 años. Además, se estima que estos influencers pueden generar tasas de engagement hasta tres veces más altas que los influencers reales. ¿Será que la realidad ya no es tan interesante como para conectar con el público?
Alex no solo representa un avance en la integración de tecnología en el deporte, sino que también refleja el perfil digital de una nueva generación de fans que, al parecer, demandan formatos innovadores, frescos y originales. Su capacidad para adaptar mensajes, interactuar de manera personal y mantener una imagen coherente y controlada lo convierte en una herramienta poderosa para conectar con el público joven. O eso dicen.
En un mundo donde los estadios luchan por llenarse y donde las audiencias televisivas fluctúan, LaLiga apuesta por un camino donde lo virtual parece tener más peso que lo real. Quizá en el futuro veamos partidos jugados por avatares mientras los jugadores de carne y hueso se convierten en meros espectadores. Al fin y al cabo, si un influencer virtual puede generar más engagement que una persona real, ¿por qué no llevar esa lógica al terreno de juego?
Alex es más que una figura digital; es un síntoma de los tiempos que corren. Un puente entre tradición y modernidad, nos dicen, uniendo generaciones a través de la tecnología y los valores que han hecho del fútbol un deporte global. Aunque quizás deberíamos preguntarnos si, en este proceso, no estamos perdiendo parte de la esencia que hizo del fútbol algo más que un deporte: la pasión auténtica, las emociones reales y las historias humanas que ningún algoritmo puede replicar.
Mientras tanto, esperaremos a ver cuál será el próximo paso de LaLiga en su carrera por la innovación. Quizá un árbitro virtual que nunca se equivoque, o hinchas digitales que llenen las gradas sin causar disturbios. Lo que está claro es que el fútbol, tal y como lo conocíamos, está cambiando. Y no sabemos si para mejor.